lunes, 5 de agosto de 2013

Apoyado en la pared

Nunca sabe uno lo que puede encontrar en cualquier parte, quizá mientras espera sentado, quizá durante un paseo. Y a veces, al pasar por delante de algo extraño o inusual tenemos que preguntarnos: ¿he visto lo que he visto? Quiero decir, ¿realmente es eso lo que he visto?

Algo así me ocurrió esta semana pasada.

¿Es un palo? ¿Es una escoba? No: es Papá Noel.

Este curioso Papá Noel descansa en el patio trasero de un colegio. Pero, ¿realmente podemos pensar que descansa? ¿Aguardará quizá al regreso de los escolares? ¿Esperará que lo recoja el conserje? ¿Intentará eludir sus tareas de limpieza? O… ¿no será que intenta esconderse? Y en ese caso, queridos lectores, ¿de quién o de qué se esconde?

¿Qué pensáis?

3 comentarios:

  1. ¿Quién sabe? Quizá, simplemente, está esperando que llegue la próxima Navidad, con su olor de mazapán... Aunque así apoyado y a casi 40º en pleno agosto la cosa pierde bastante glamour...

    ¡Saludetes gatunos! ;)

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  2. Pues yo pienso que ese papá noel, lleva de juerga desde navidad y claro, estas alturas del año ¡el pobre ya no se tiene derecho!

    Otra opción podría ser el agotamiento después de tanto trabajo, pero tal y como andan las cosas a nivel laboral, creo que esa la descarto.

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  3. Pues sí amigos, son dos opciones muy bien pensadas a tener muy en cuenta. Habrá que estar atentos para ver los movimientos de este Papá Noel-Escoba en los próximos meses...
    Un saludo y gracias a los dos

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